Arrivederci

Último día de vacaciones. Mañana retomo eso que llaman Universidad. Por si no queréis leeros mi blog entero, podéis enteraros de quasi todo en este resumen brainstorming de lo que ha sido mi verano.

Treinta y dos fiestas (contadas), unas pocas menos de borracheras (tampoco muchas menos), otras tantas resacas, ocho conciertos, fiesta en la playa, nuevas metas, la hoguera, exfoliarse con arena, la tensión de los partidos del mundial, Piqué(L), el Waka-Waka, los disfraces por el pueblo, llorar con el final de las Pepsi, el reencuentro con la sidra, twitear, las despedidas de la gente que se iba de viaje, los reencuentros con los que volvían, bañarse en la fuente dos veces en una semana, ver a España ganar un mundial, hacer cosas que nunca pensé que haría, tocar la guitarra, cantar la canción del Mercadona en cualquier momento, emborracharse a las 8 de la tarde, seguir borracha a las 6 de la mañana, Mexicanas (wey!), corromper a mi prima llevandola por la mala vida, salir de Martes, y de Miércoles y... ¡salir durante siete días seguidos!, conocer gente nueva que merece la pena, pizzas, cachimbas, karaoke, Beer Pong, vodka rojo, fuegos artificiales, Kebaps a las 3 de la mañana, macarrones a las 7, dormirse escuchando la lluvia aunque no esté lloviendo, Waka-waka de nuevo (es que fueron muy pesados), mojarse en alcohol, Roma, entender a los italianos metiendo ficha, filosofar, meter a 15 personas en casa para celebrar un cumple, celebrarlo con la gente que quiero, no entender nada, Foster's, caballos, Sunny, idas de olla, yo nuncas, risas, lágrimas, alguna que otra decepción, Audrey, invitaciones a casas ajenas, autocine, Cómo conocí a vuestra madre, calor, bailar, soñar despierta... Creer que todo es posible.

Gracias verano, este año te has portado genial conmigo. Nos vemos en 10 meses :)